*Amanece Makawee*

Ya fértil y con regadera,

regadera llena de amor propio extensible,

emerge Makawee desde las profundidades del útero.

Tan acorde, tan en contacto

tan agradecida y sonriente.

Yo a mis 25 años renazco

y no voy a cesar hasta mi muerte.

Que la vida es una,

así me enseñó la libélula.

Que el sol brilla y la tierra late.

Que hay acuerdo entre mis cuerpos,

materia va a la tierra, energía va al cielo

y el resto de mi,

en el medio,

con conciencia, uniéndolos.

Oh Con la bendición de una paloma atrevida

y las caricias del viento

amanece Makawee, sonriente.

Acompañada de ancestros y herramientas.

Con el poder del sí mismo,

hermosa generosa doncella de la tierra.